Parte 28 - La angustia y los trastornos de ansiedad


La angustia y los trastornos de ansiedad


   La angustia es posiblemente de las experiencias mas antiguas del hombre vinculadas con la supervivencia.
Desde el nacimiento, el angosto canal hacia la vida ha dado origen al término que se relaciona también con la necesidad de respirar, en ese dramático trance del estado acuático materno hacia la atmósfera y la luz solar.
   La angustia alude a esa eventual zozobra, al riesgo, la incertidumbre de no saber lo que nos espera.
El recuerdo de una tempestuosa marea, de un casi naufragio del que logramos salvarnos, nos acompaña siempre en las neblinas de la memoria.
   La ansiedad es una muestra atenuada, lavada de esa vivencia, que los mecanismos de defensa intentan mantener a raya.

Crisis de angustia o ataques de pánico

   Las crisis de angustia denominadas también ataques de pánico son episodios de aparición abrupta de angustia intensa, acompañada habitualmente de síntomas como ahogo, dificultad para respirar, opresión, dolor precordial, palpitaciones, temblores, inestabilidad, mareos, náuseas, malestares intestinales, sudoración, sensación de muerte inminente, miedo a la pérdida de control o a volverse loco, parestesias, hormigueo, sensaciones de extrañeza, síntomas que alcanzan su máxima expresión en pocos minutos.
   Todos estos síntomas nos sugieren el antiguo origen de la vivencia, cuyo detonante puede estar en ocasiones tan oculto a la conciencia del sujeto, como la velada primer experiencia asfixiante.
   Algunos síntomas en el repertorio homeopático:
Angustia (subrubros)
Ansiedad (subrubros)
Ansiedad,- con ataques
Ansiedad,- (ataques de ansiedad) en paroxismos,- con angustia,- con arcadas,- por anticipación,- al anochecer,- por bagatelas,- sin causa,- con asma,- en casa,- con cefalea,- con presión en el corazón, por asuntos domésticos,- en el embarazo,- por los demás,- por dolores,- por su familia,- por él mismo,- hablando,- hipocondríaca,- por el futuro,- al leer,- con opresión,- por los negocios,- por la noche,- movimiento agrava, mejora,- en niños,- periódica,- como si fuera perseguido,- con respiración impedida,- con dolor en el pecho,- cuando está solo,- por ruido,- por su salud,- cuando conduce,-
Miedo ataques de pánico (miedo súbito),- a tener un ataque
Miedo,- terror
Pecho,- ansiedad en,- región del corazón
Pecho,- angustia en región del corazón
Respiración,- ansiosa,- asfixia,- acelerada,- dificultosa,- jadeante,- en paroxismos
Transpiración,- durante la ansiedad

Trastorno de angustia

   El trastorno de angustia se trata de la reiteración de crisis de angustia inesperadas y la preocupación que provoca en el sujeto volver a padecerlas, así como el conjunto de complicaciones que puede traer a su vida.
Existe un abanico de evoluciones, algunos mejoran en meses o pocos años, mientras que otros persisten o agravan los síntomas.
   La agorafobia es el temor a lugares abiertos o situaciones de donde pueda ser difícil salir o pedir auxilio de padecer una crisis de pánico, limitando la vida del sujeto.
En ocasiones las crisis de angustia se acompañan de agorafobia.
   Algunos síntomas en el repertorio homeopático:
Agorafobia (miedo a espacios abiertos)
Miedo en una multitud
Ansiedad en una multitud
Miedo de salir
Desmayo en calle atestada
Vértigo al caminar en un espacio abierto
Aversión a salir
Miedo de ser atropellado al salir
Miedo de caminar por una calle concurrida

Trastorno de ansiedad generalizada

   Se denomina a aquellos cuadros de ansiedad y preocupación excesiva que no alcanzan el grado de intensidad de las crisis de angustia y cuya duración se extiende por lo menos seis meses. Habitualmente hay también dificultades en la concentración, irritabilidad, tensiones musculares y alteraciones del sueño.
Los cuadros mencionados pueden ser considerados desde la antigua nomenclatura europea como parte de la sintomatología de las neurosis de angustia.
Valgan aquí los síntomas del repertorio homeopático mencionados anteriormente.

Fobia

   Se entiende por fobia a un miedo intenso y persistente por diversas situaciones u objetos específicos.
Este miedo es habitualmente reconocido por los propios pacientes como excesivo e injustificado, no obstante lleva a adquirir conductas evitativas.
Hemos mencionado la cercanía que existe entre el miedo y la angustia.
El psicoanálisis lo vincula en especial al mecanismo de desplazamiento, donde el objeto original de la angustia se reprime por intolerable a la conciencia y se traslada a otro objeto de menor compromiso afectivo al que puede controlar mejor evitando su encuentro.
   Algunos síntomas en el repertorio:
Miedo (subrubros múltiples),- a los animales,- a las arañas,- de ser asesinado,- del contagio,- de un desastre,- a la desgracia,- de dolencias imaginarias,- de enfermedad inminente,- de ser envenenado,- de lugares estrechos,- de los extraños,- de los fantasmas,- al fuego,- de la gente,- de ser golpeado,- de salir,- de los gatos,- de infección,- a los insectos,- a los ladrones,- a los pájaros,- a los perros,- a los ratones,- a las ratas,- de las serpientes,- de las sombras,- de estar solo,- de ser tocado

Trastorno obsesivo compulsivo

   Se trata de la presencia de obsesiones, es decir pensamientos persistentes, invasivos y  molestos que si bien son reconocidos como propios, provocan ansiedad y que el sujeto se siente obligado compulsivamente a intentar neutralizar a través de otros pensamientos, prácticas o rituales personales también de carácter reiterativo a fin de disminuir al menos parcialmente el malestar.
   Es habitual su relación con pensamientos y temores de contraer enfermedades, pensamientos sexuales no aceptados y angustiantes, catástrofes o peligros para las cuales debe compulsivamente realizar rituales personales reiterativos, con la creencia mágica de que así evitará que sucedan.
Generalmente tiene un curso crónico.
   Valgan aquí los síntomas del repertorio homeopático referidos en la neurosis obsesiva.

   Existen otros trastornos de ansiedad descritos, como el trastorno por estrés postraumático consistente en el recuerdo persistente de situaciones sufridas de carácter traumático y violento, muertes en accidentes, guerras, catástrofes y que el sujeto reexperimenta como aún presentes.
La clasificación utilizada en este apartado proviene del DSMIV.
   Algunos posibles síntomas:
Trastornos por muerte de seres queridos,- hijo,- padres, amigos
Trastornos por traumatismos, accidentes
Trastornos por susto